Si quieres vender o alquilar tu casa, una de las cosas más importantes es mostrarla de la mejor manera posible a los potenciales compradores o inquilinos. Para ello, es fundamental contar con unas buenas fotografías que capten la atención y el interés de los visitantes.
Pero, ¿cómo preparar tu casa para una sesión fotográfica? No se trata solo de limpiar y ordenar, sino de crear un ambiente acogedor, luminoso y atractivo que resalte las cualidades de tu vivienda.
Te damos algunos consejos para preparar tu casa para una sesión fotográfica:
- ¡Limpieza a fondo! haz una limpieza profunda de toda la casa, prestando especial atención a las zonas más visibles, como la cocina, el baño, el salón y los dormitorios. Elimina el polvo, las manchas, las huellas, los malos olores, etc. Haz que todo brille y huela bien.
- Despeja los espacios. La clave aquí es la simplicidad. Retira objetos personales, despeja mesas y encimeras, y guarda esos artículos que no aportan al atractivo visual. Deja lo imprescindible y procura que cada cosa tenga su sitio. Evita el desorden y el exceso de muebles o accesorios que puedan hacer que el espacio se vea más pequeño o saturado. Queremos que los posibles compradores se imaginen viviendo allí, ¡así que menos es más!
- Juega con la iluminación natural. Aprovecha la luz natural tanto como sea posible. Abre cortinas y persianas para dejar entrar la luz natural, que es la más favorecedora para las fotografías. Enciende las lámparas y las velas para crear un espacio cálido y acogedor. ¡Las fotos con buena iluminación hacen que tu hogar se vea más acogedor y atractivo!
- Decoración neutra y atemporal. Despersonaliza el espacio, elimina los objetos personales como fotos, diplomas, etc., que pueden distraer. Deja solo los elementos decorativos que aporten estilo y calidez, como cojines, mantas, plantas, velas, etc. Opta por colores neutros y accesorios atemporales. Esto no solo hace que tu hogar sea más atractivo para un público más amplio, sino que también ayuda a que las fotos se vean más nítidas y atractivas.
- Arregla pequeños detalles. ¿Hay grifos que gotean, interruptores que no funcionan o pequeñas reparaciones pendientes? Es el momento de revisar el estado de las paredes, suelos, ventanas, etc. Si es necesario pinta las paredes con colores neutros y claros que aporten amplitud y luminosidad. Un hogar en buen estado transmite confianza a los compradores.
- Cuida el exterior. No te olvides del exterior. Un césped bien cuidado, jardines arreglados y una entrada limpia dan una excelente primera impresión. ¡La fachada cuenta mucho!
- Añade detalles acogedores. Pon flores frescas, fruta, revistas, etc., que den un toque de color y vida a la casa. Coloca cojines, mantas, alfombras, etc., que aporten textura y confort. Enciende la chimenea, velas y luces para crear un ambiente cálido y hogareño.
- Prepara cada habitación. Dedica tiempo a preparar cada habitación. Asegúrate de que las camas estén bien hechas, las cortinas estén rectas y los espejos limpios. Pequeños toques marcan la diferencia.
Siguiendo estos consejos, podrás preparara tu casa para una sesión fotográfica que la haga lucir espectacular y que atraiga a más compradores o inquilinos. Recuerda que la primera impresión es la que cuenta, así que no escatimes en esfuerzos para mostrar tu casa de la mejor manera posible. ¡Buena suerte!