Todo el sector inmobiliario estamos expectantes con la entrada de la nueva Ley de la Vivienda, y es que se avecinan cambios. Os mantendremos informados.
La nueva Ley de Vivienda está cerca de ser aprobada tras meses de negociaciones, pero ha generado controversia en cuanto a cómo afecta tanto a propietarios como inquilinos.
Una de las principales novedades es la definición de grandes y pequeños tenedores, ya que ahora se considera grandes propietarios a aquellos que poseen cinco o más inmuebles en un área tensionada, en lugar de los 10 que se requerían anteriormente.
Otro aspecto fundamental es el tope a los precios, que establece limitaciones en la actualización de las rentas de alquiler. Los pequeños propietarios tienen su límite en la indexación a la renta anterior, mientras que los grandes propietarios estarían sujetos a un índice de precios aún por definir. La nueva ley también define las zonas tensionadas, que estarán sujetas a dos condiciones, y correrá a cargo de las Comunidades Autónomas su declaración.
Otras novedades incluyen la obligación de los propietarios de pagar las comisiones inmobiliarias y medidas de protección frente a los desahucios. La nueva ley también contempla incentivos fiscales en el IRPF para los propietarios de viviendas en zonas tensionadas, aunque aún no se han detallado.